Las estrategias de la Secretaría de Educación en Tamaulipas –SET- han fracasado en el combate contra la obesidad infantil y la prevención de enfermedades crónico-degenerativas al prevalecer la venta de comida “chatarra” en las escuelas públicas y privadas.
San Fernando no es la excepción en esta problemática, donde las cooperativas y cafeterías escolares no consiguieron erradicar golosinas, frituras, refrescos, harinas, ni otros alimentos con altos contenidos de grasas y azucares, ya que a pesar de que son altamente perjudiciales para la salud de los niños, son los mismos alumnos los que se rehusaron a dejar una mala cultura que data de muchos años.
Incluso, hay reportes que en algunos planteles de esta ciudad, mismos directivos y maestros, permiten a los estudiantes vender productos “chatarra” que llevan para obtener un ingreso extra, aunque a espaldas de los padres de familia, que desconocen que sus hijos realizan este comercio..
Por otro lado, de acuerdo con especialistas en temas de salud, los casos de diabetes infantil han subido drásticamente en últimos años, representando riesgos graves para los enfermos y gastos fuertes para sus familias, derivado de una mala alimentación agravada por el sedentarismo, lo que puede reducir de manera alarmante la calidad y tiempo de vida.