Sin iluminación, baños públicos y usualmente sin agua potable, los panteones de San Fernando requieren de mejores condiciones, para que esos lugares donde reposan miles de difuntos, luzcan dignos ante los ojos de las familias que los visitan de manera regular.
El panteón “San Francisco” localizado en la colonia Loma Alta, es la necrópolis de mayor movimiento en los días de los fieles difuntos y en otras fechas, como el 10 de mayo y aniversarios luctuosos o de nacimiento de las personas que ahí encontraron su última morada.
Este cementerio, que es el más grande de la ciudad, carece de los servicios básicos, está integrado por miles de tumbas de sanfernandenses y personas de otros sitios, que han sido sepultados ahí en las últimas décadas.
Por otra parte, el agua no alcanza a llegar hasta ese lugar de manera regular, por lo que en ocasiones se instalan tanques con líquido para que las personas puedan llevar a cabo la limpieza en las tumbas de sus seres queridos que ahí descansan, asi como en fechas de mayor numero de visitantes.
En tanto que el panteón “viejo” localizado en la zona centro de la ciudad, se encuentra en desuso desde hace más de 50 años y ahí están depositados restos de personas de todas las edades, que fallecieron hace hasta más de dos siglos, siendo uno de los que menos visitas reciben, aunque también es abierto al público en ciertas épocas.
Este mismo escenario enfrentan el cementerio de la colonia “Paso Real” y otro localizado al fondo de la colonia “Américo Villarreal”, llamado “Jardines de la Paz” que aunque también, carentes de servicios básicos son objeto de visitas por parte de quienes tienen por costumbre acercarse a las tumbas de sus familiares sepultados en ese lugar, sitios que requieren de una modernización en sus instalaciones para convertirlos en espacios más dignos para memoria de quienes ahí fueron inhumados.