Una cifra superior a mil hombres y mujeres residentes de San Fernando se ganan la vida honestamente trabajando en maquiladoras de Reynosa, a las que van y vienen constantemente en el ánimo de resolver situaciones básicas de sus familias, dejando una derrama por semana en San Fernando, por pago de sueldos cercana a los dos millones de pesos, lo que también alivia la situación del comercio local.
El recorrido habitual hacia esa ciudad fronteriza, localizada a 147 kilómetros al norte de San Fernando se debe a la falta de oportunidades locales de empleos, que llevan a las personas a aceptar el riesgo de viajar esa distancia en una carretera cada vez más insegura, en lugar de quedarse en sus casas, a lamentarse por la falta de recursos económicos para resolver necesidades básicas de sus familias.
Anexo a la derrama en sueldos a obreros de San Fernando que por mes asciende a más de 8 millones de pesos y se convierte en la salvación del comercio local, los empleados de las maquiladoras son afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social –IMSS- por lo que además de contar con seguridad social, comienzan a registrar derechos laborales y en todos los casos, ganan más del salario mínimo y con el tiempo pueden aplicar para una vivienda de interés social.
La solución para miles de personas con necesidad de trabajar es la instalación de maquiladoras en San Fernando, pero mientras que esto sucede, las industrias de la frontera están mitigando el agobiante desempleo que padece el municipio y que origina que miles de residentes locales tengan que aceptar la salida de sus lugares de residencia para aceptar ofertas Foraneas con la determinación de obtener el sustento para sus familias.