El magisterio representa a nivel nacional una fuerza demoledora que a lo largo de la historia, ha sido capaz de doblegar a la parte oficial en la mayor parte de las confrontaciones que se han registrado, en esa lucha interminable, por demostrar quién puede más.
No fue hasta que el entonces Presidente de México ENRIQUE PEÑA NIETO a tres meses de iniciado se mandato en el 2013, mandó meter a la cárcel a la insoportable lideresa nacional del magisterio ELBA ESTHER GORDILLO, cuando se dieron cuenta que también les entran los “guamazos”.
Ya antes, el gobierno había dado una demostración de rigor cuando el líder petrolero más famoso de la historia JOAQUÍN HERNANDEZ GALICIA, “La Quina”, fue apresado por delitos que nunca se demostraron, pero que sirvieron para exhibir la fuerza del estado.
Es decir, que los líderes no son intocables, aunque algunos de la vieja escuela, siguen usando la presión como principal medida para lograr sus fines, que a veces no son precisamente en aras del beneficio de sus representados, sino que de ellos mismos.
Le comento esto porque ayer sorprendió la acción orquestada que se realizó en todo el estado, en torno a la toma de las oficinas centrales de la Secretaria de Educación de Tamaulipas –SET- en Cd. Victoria y los Centros Regionales Para el Desarrollo de la Educación –CREDE- a causa de demandas y compromisos no cumplidos, entre la parte oficial que representa la señora LUCÍA AIMÉ CASTILLO PASTOR y por la sindical, el Profr. ARNULFO GUTIÉRREZ TREVIÑO, un líder astuto y muy conocedor de las entrañas del poder, que al tomar la decisión de ponerse a las patadas con el Gobierno de Tamaulipas, sabe bien a lo que le va tirando.
En evento de ayer, el líder del magisterio en la entidad se le fue al cuello a la maestra AIMÉ CASTILLO, de quien como base de cualquier negociación con el Gobierno del Estado, está pidiendo su destitución, a quien acusó de no acordarse ni siquiera de su nombre –de ARNULFO- y omitir la mención de la sección XXX en reciente evento celebrado en San Fernando, donde estuvo presente,
“Tope en lo que tope” fue la expresión de ARNULFO RODRÍGUEZ ayer ante los medios y un grupo numeroso de maestros, cuando habló de exigir el cese de LUCÍA AIMÉ, pero hizo la aclaración, que su pleito no es con el Gobernador AMÉRICO VILLARREAL.
Se anticipa que el gobierno del estado no puede ceder totalmente a las presiones, así que habrá negociaciones en el ánimo de llevar la fiesta en paz, pero ¡aguas con los maestros!.
Este primer paso puede ser el preludio de conflictos próximos combates para pedir la destitución de varios jefes de las oficinas regionales de educación, que se han distinguido por soberbios, al grado de ponerse al “tú por tú”, con las maestras y maestros, hasta llegar a golpear el escritorio y gritarles, en actitudes histéricas y fuera de todo contexto.
Habrá que ver que resulta de este conflicto para entender mejor la postura de la parte oficial y la sindical, que en este momento están jugando a las vencidas, midiendo fuerzas, en un ejercicio donde finalmente las cosas no irán más allá de los arreglos normales en este tipo de enredos.
No sería la primera vez que las diferencias entre maestros y gobierno en Tamaulipas se resuelven con la entrega de nombramientos en la misma SET, que además de la fuerza natural del SNTE, es también parte de los dominios del magisterio; es decir tienen su organización, pero también tienen metidas las manos en la maquinaria oficial.
Veremos y comentaremos con ustedes lo que resulte de este asunto que a varios les quita el sueño, porque aunque usted no lo crea, están sacando a relucir anomalías de otras índoles que se podrían agregar al pliego petitorio y alcanzar a funcionarios regionales que fueron designados por “amiguismo”, sin pasar por ningún control de confianza y calidad, es más que no saben ni siquiera que significa esta ultima palabra.