Productores de la región temen que en la temporada de cosecha de sorgo les apliquen fuertes descuentos, al entregar en más de 40 recibas de sorgo que funcionan de manera tradicional, principalmente en el municipio de San Fernando, bajo sospechas de esquilmar en la basculas y normas de calidad del grano.
Estos abusos han diezmado sistemáticamente las utilidades de productores del campo, que se encuentran a merced de los acopiadores, de los cuales, una buena parte tienen antecedentes como abusivos en la básculas, humedad del grano y otras normas, que se traducen en descuentos que afectan la economía de los productores.
Refieren que en los centros de acopio se aplican descuentos superiores a los 20 grados de humedad, lo que es calificado como injusto por los productores, luego que esto representa una reducción muy sensible en el pago de las cosechas, mientras que ellos con su experiencia natural, saben que el grande no contiene esos niveles.
Los descuentos que sufren los productores de sorgo en las compras, son un agregado a las condiciones que enfrentan en el proceso de comercialización, luego que en las bodegas de granos, “jinetean” al máximo los pagos bajo el menor argumento.
Esta situación se ha convertido en un calvario años tras año, mientras que los agricultores no cuentan con verificaciones oportunas de la PROFECO y ni siquiera tienen ya el comité de supervisión y vigilancia que hace algunos años se encargaba de prevenir y combatir abusos de los bodegueros.