Algo que todavía muchas personas beneficiarias de programas federales no entienden, es que los llamados “servidores de la nación”, no son autoridades de ninguna clase, tampoco pueden servir de intermediarios ni de asesores en el manejo de los recursos que reciben a través de los programas federales.
Porque se ha mal entendido y peor aplicado el funcionamiento de individuos, que abusando de la ignorancia de algunas personas se toman el papel de asesores, cuando se trata de manejar recursos públicos.
Y definitivamente no es esa su función.
El gobierno federal para evitar actos de corrupción, envía el dinero directamente y sin intermediarios a las personas encuadradas en el padrón de beneficiarios de los programas sociales, pero resulta que los “servidores de la nación”, en todo meten las manos.
Si es en los apoyos del llamado BIENPESCA, se las ingeniaron para incluir en el padrón a personas que no viven en la laguna madre, radicadas en Monterrey y otras poblaciones de la frontera, mientras que muchos que si viven en zonas costeras y ejercen la actividad productiva, fueron dejados fuera.
En su momento hubo muchas quejas al respecto, lo que llevó a realizar verificaciones sistemáticas para ir corrigiendo entuertos y lo mismo ha ocurrido en otros programas, donde se ha puesto en evidencia la honestidad de algunos –no todos- los llamados “servidores de la nación”, que finalmente han terminado en “vividores de la nación”, porque han sabido aprovechar muy bien sus cargos para obtener beneficios que les corresponden a los empadronados, que muchas veces y de pronto, no aparecen en las listas que se hacen públicas, pero que siempre se ha dicho que hay otras relaciones, donde si vienen los nombres, solo que estas no aparecen a la vista de todos,.
Y es así como se han consumado muchas acciones que van en contra de los beneficiarios y en contra de los recursos de la nación, pero al momento se trata de un ámbito blindado, donde no penetran las quejas ciudadanas, mientras que los mecanismos de comprobación internos, parece que están hechos para permitir el pillaje,
En San Fernando constantemente se han escuchado expresiones acusando de corrupción a los “servidores de la nación”, pero nadie hace caso, nadie investiga, comenzando por el sub delegado regional MARIO ELOY OCHOA GARZA, quien visiblemente es el responsable del trabajo que hace su tropa.
Y no hablemos de la eficiencia de estos llamados “servidores de la nación”, a quienes culpan de cometer tantos errores en la captura de datos, que cientos de productores agrícolas de San Fernando, están fuera de la cobertura del programa “Producción para el Bienestar”.
La corrupción por un lado y el otro la incompetencia; muy buena fórmula para el desgarriate.
Las intenciones transformadoras del Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR son bastante sanas y dignas de aplausos, pero como siempre pasa, “abajo” se estrellan contra las marrullerías de quienes dándose golpes de pecho al proclamar honestidad a ultranza y diciéndose victimas de gobiernos anteriores, ahora ostentan las siglas de la 4T… ¡para hacer lo mismo de lo que se quejaban antes!.