Según el Fiscal General de Tamaulipas IRVING BARRIOS MOJICA ya hay 25 denuncias contra ex funcionarios públicos de la anterior administración ante la Fiscalía Anti Corrupción por presuntos actos delictivos, de los cuales, ya se está ocupando la instancia respectiva.
El Fiscal, quien es uno de los emblemas del Cabecismo enquistado en el actual Gobierno de Tamaulipas, maneja el tema con las yemas de los dedos y una cautela que lo hace aparecer, o quiere aparentar ser, una hermana de la caridad, cuando en todo el país son bien conocidos sus perversos oficios.
Habla de “presuntos” actos de corrupción de funcionarios del sexenio pasado, pero no abunda mucho en detalle, no dice siquiera en que dependencias medraban los investigados y prefiere hablar de temas más importantes para el, como de los desaparecidos, por ejemplo.
Como si le importara mucho este rubro, que en el pasado sexenio, cuando él ya era Fiscal General de Tamaulipas fue abandonado por el Gobierno del Estado, pese a los reclamos de los colectivos, integrados principalmente por madres de desaparecidos, que en todo momento, denunciaron la inacción y apatía de la administración panista.
Da risa cuando habla de 25 casos de posible corrupción, cuando cientos de tunantes, entre ellos varios o la mayoría de los ex alcaldes se llenaron las alforjas con recursos del presupuesto y andan por ahí paseándose impunemente y riéndose de la justicia.
Mientras que IRVING BARRIOS se mantenga como Fiscal General de Tamaulipas, los saqueadores del presupuesto del periodo de FRANCISCO GARCIA CABEZA DE VACA podrán sentirse tranquilos, porque el personaje fue anclado en ese cargo, precisamente para cuidar del ex Gobernador y sus achichincles.
Aunque dicen que ya se va y que IRVING BARRIOS está de acuerdo con entregar la Fiscalía, siempre y cuando no le finquen ningún tipo de responsabilidad penal o administrativa, porque al final de cuentas, el solo fue un ejecutor de los designios del ex Gobernador de Tamaulipas, hoy prófugo de la justicia mexicana.
Y dentro de la filosofía del pueblo mexicano, se da como bueno que “el mandado no es culpado”, puede ser que se la hagan efectiva y que lo dejen ir, a disfrutar de sus “ahorritos” de seis años a otra parte, mientras que le sale otra oportunidad de acomodarse en otro gobierno panista, para que pueda seguir haciendo lo que peor le sale; me viene a la mente “el michoacanazo”.
Lo que por cierto me recuerda que en la élite del poder estatal, ya se rumora que un magistrado de ascendencia sanfernandense, está considerado para ser el próximo titular de la Fiscalía General de Justicia en Tamaulipas.
Una pista: se apellida GRACIA.