Manejar con toda la precaución, respetando las leyes de transito que rigen en México y sobre todo pensando en la seguridad propia y de las familias que viajan en otros vehículos, pidió el representante de la Casa San Fernando en Houston Texas Juan Manuel Gracia Jasso.
Lo anterior ante la serie de percances vehiculares ocurridos en los últimos días en las carreteras que pasan por San Fernando y donde se han visto involucrados “paisanos” que transitan hacia el interior del país, a pasar las fiestas navideñas y el fin de año con sus familias.
Mientras que también, se escuchan airadas protestas de conductores de esta región, ante la forma desordenada y en ocasiones violentas como conducen los “paisanos” en el ánimo de llegar más rápido a sus respectivos destinos, generando un riesgo mayor para otras personas en tránsito.
Las carreteras del norte de Tamaulipas se encuentran saturadas de connacionales que proceden de Texas y otras regiones de la unión americana, que ansían llegar a ver a sus familias, lo que provoca que manejen jornadas muy largas y sin descansar, lo que aunado a la velocidad y lo intenso del tráfico vehicular, incrementan el riesgo de percances.
Gracia Jasso señaló que la misma disciplina que demuestran los “paisanos” al manejar en los Estados Unidos de Norteamérica deben de aplicarla en México y de ninguna manera convertirse en factor de riesgo, como ha venido sucediendo.
Explicó que no en todos los casos es lo mismo; la mayoría de los “paisanos” son personas maduras y responsables, que manejan de forma muy ordenada y en acatamiento a las leyes de transito de la República Mexicana, por lo que es triste, que por unos inconscientes, tengan que etiquetar a todos los demás como irresponsables.
Por este motivo, convocó a todos los mexicanos residentes en el vecino país a manejar con la máxima precaución en sus trayectos dentro de la República Mexicana, para que puedan llegar bien a sus destinos y también, para que no pongan en peligro la vida de otras personas que se mueven por las carreteras, pero además para no manchar la imagen de los migrantes, que en su gran mayoría son personas sanas y de respeto, que no merecen que los miren con recelo o desconfianza.