El ganado que se cría la región de San Fernando se encuentra padeciendo de una deficiencia alimentaria, derivado de la escases de comida que ha venido prevaleciendo, como efecto de la sequía que terminó apenas hace unos días con el arribo de las primeras lluvias, por lo que se espera una recuperación total de pastizales y maleza.
Las precipitaciones de los días recientes han venido a cambiar el rostro de la naturaleza y ya se mira el reverdecimiento de la vegetación silvestre, mientras que empresas dedicadas a los pronósticos del tiempo, aventuran que seguirán las lluvias.
El altiplano tamaulipeco, Aldama, Soto la Marina, Cruillas, Burgos, Méndez y San Fernando han enfrentado condiciones severas de sequía durante los primeros ocho meses del año, provocando un desmerecimiento en el estado físico de los hatos, donde inclusive se ha registra mortandad de reses.
Por fortuna las lluvias van a sacar de ese estado crítico a la ganadería en esta región del norte de Tamaulipas, donde se producen semovientes de la mejor calidad, para el consumo regional, destacando también como fuerte productor de becerros que se exportan hacia el lado americano y otras naciones.