Por Aristeo Manilla García
San Fernando tiene un consejo de administración de la COMAPA, que solo sirve para tres cosas… usted ya sabe.
En teoría, se trata de un organismo formado por representantes de instituciones y de la sociedad civil, que tiene como objetivo reunirse, analizar problemáticas del organismo y bajo la suma de esfuerzos de los tres niveles de gobierno y la propia sociedad local, buscar alternativas adecuadas para las situaciones más graves y apremiantes que se padezcan en ese rubro de los servicios públicos.
El consejo de la COMAPA por ley, lo preside el Presidente Municipal: ese mismo que ha demostrado ser la nulidad personificada cuya única gracia ha consistido en saquear de manera burda las arcas del pueblo; invisible en el Ayuntamiento y de la misma manera etéreo en el organismo operador.
Ahí están también representados, la Comisión Estatal del Agua –CEAT- el Congreso de Tamaulipas por medio de su diputada NOHEMÍ ESTRELLA, que es más bien como un cometa, que se deja ver en muy raras ocasiones; la Secretaria de Salud ahí aparece también y demás dependencias, que han designado emisarios inútiles, al cien por ciento de la expresión.
Ni siquiera se les puede llamar servidores públicos, son simples nombres que han servido para llenar formatos; de hecho en cinco años, el consejo de la COMAPA no se ha reunido ni siquiera en tres ocasiones, pese a que se trata de un organismo que padece de una enfermedad crónica, que hace crisis por varias ocasiones en las temporadas más calurosas del año y por lo mismo amerita lluvias de ideas y acciones para mantenerlo en buen estado.
Y en ese consejo de la COMAPA, aparecen dos representantes del sector privado, en este caso dos comerciantes de San Fernando con prestigio de personas honestas y de trabajo, que lamentablemente, solo han servido “de relleno” en un patronato fraudulento, que no se reúne, que no aborda las problemáticas del organismo y que mucho menos, busca soluciones a las necesidades prioritarias.
San Fernando es un cementerio de “elefantes blancos” y el consejo de administración de la COMAPA es uno más de ellos; desde el 2016 –primer periodo de PEPE RÍOS- que fue instalado, solo se reunió una vez y en el 2018, con la “nueva” administración encabezada otra vez por el mismo, ya no se revalidó.
De tal suerte que los representantes del sector privado anteriores –LEONEL ARTURO SALINAS CURIEL y JOSÉ ALBERTO MARÍN CASTILLO – no fueron sustituidos en el acta de rigor, donde por cierto aparecía LYDIA MADERO por el Sector Salud y FIDEL BUJANDA MARTÍNEZ, como representante de la Secretaria de Obras Públicas del municipio de San Fernando, quienes como se sabe, por diferentes motivos dejaron esos puestos.
Al inicio de la próxima administración municipal se tendrá que renovar el consejo de administración de la COMAPA de San Fernando y esperemos que en esta ocasión, los nombramientos recaigan en personas responsables, interesadas en desempeñar esa responsabilidad –honorifica por cierto-, que cumplan con su cometido y dejen de ser un adorno de mal gusto, un monumento a la inutilidad, donde se requiere compromiso y eficiencia para que se vea y se sienta un cambio en el bienestar de las familias.
