Por Aristeo Manilla García
Aunque se supone que la mesa está servida para que MORENA se despache con la cuchara grande en Tamaulipas en las elecciones para Gobernador -2022- ya se mIran factores que en procesos anteriores han sido ruinosos para el partido de la 4T.
Uno de ellos, es que a menos de un año de las elecciones, no hay una dirigencia formal constituida y que la figura de un delegado nacional con facultades plenipotenciarias parece más un mito, porque finalmente las decisiones surgen de otras esquinas del poder.
Luego… hay una lista demasiado larga de aspirantes, que a falta de liderazgos oficiales que sean capaces de aglutinar y contener las expresiones contradictorias al interior, más que ayudar a la cohesión morenista, se podrían convertir en motivos más de encono. AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL, FELIPE GARZA NÁRVAEZ, RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO, GUADALUPE COVARRUVIAS CERVANTES, MARIO ALBERTO LÓPEZ HERNÁNDEZ “La Borrega”, HÉCTOR MARTÍN GARZA GONZÁLEZ “El Guasón” y hasta la alcaldesa panista MAKI ORTÍZ DOMÍNGUEZ, son cartas de la baraja que se mencionan como aspirantes a candidatos por MORENA para suceder al panista FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.
Son muchos tiradores para una gubernatura de dos años, pero todos traen “el gusanito”, aunque la mayor parte de ellos conocen sus posibilidades y los rounds de sombra que ya están haciendo, son para amarrar “algo” dentro del próximo gobierno estatal, que están seguros, quedará bajo las siglas de MORENA.
He ahí una debilidad para ese partido, por mucho que digan que tanto aspirante solo demuestra su fortaleza y el futuro que muchos políticos de altos vuelos, quieren compartir como miembros de la 4T.
Aunque dentro de sus fortalezas tiene, que además de ser el partido de moda y ciertamente con un futuro muy promisorio, el responsable del triunfo de MORENA en Tamaulipas el próximo año, será el actual jefe político, quien no tendrá más remedio que entregar en bandeja de plata… así como el recibió las riendas del estado.
Lo curioso; pese a ser un partido desordenado, contaminado por la presencia de emisarios de corrientes contrastantes con la mística renovadora, en Tamaulipas MORENA asestó un duro golpe al partido en el poder estatal en las elecciones del 6 de junio y se espera que en el 2022, complete la faena.
Acusan a MORENA, a sus líderes y candidatos de no saber usar de manera oficiosa los programas sociales para transformarlos en votos, pero es un partido que con todo y esa imperfección, gana en las urnas, de tal suerte que en Tamaulipas gobernará a partir del 1 de octubre el 73 por ciento del territorio, tendrá “mano” en los municipios de mayor importancia económica y electoral del estado y… será mayoría en el Congreso Local.
No cabe duda, los alquimistas electorales de MORENA supieron encontrar la panacea para desactivar el modelo político nacional del último siglo en México, encarnado por el binomio PRI-PAN.
