El desempleo, es una de las principales problemáticas en San Fernando, que se ha ido dejando en el olvido por parte de los políticos que han tenido la responsabilidad de administrar a San Fernando, pese a que se trata de un reclamo recurrente de la población.
En la historia de las últimas administraciones municipales, no existen registros de gestiones realizadas para atraer inversiones en maquiladoras o agroindustrias al municipio, pese a que la falta de trabajo es una situación que desde hace muchos años agobia a miles de familias de la localidad.
Derivado de la falta de empleos, miles de personas se han ido de San Fernando en los últimos años a buscar mejores oportunidades de vida en poblaciones fronterizas del estado o del interior del país, mientras que otros se han atrevido a cruz de “mojados” el Rio Bravo para adentrarse en la Unión Americana, tratando de escapar de la miseria y darle a sus seres queridos una vida más digna, aunque con esto se provoque la desintegración familiar.
Otros tantos, agobiados por la falta de trabajo que les permita mantener o coadyuvar al bienestar de sus familias han optado por tomar caminos torcidos, al margen de la ley, con tal de ganar dinero para hacer frente a las necesidades de sus hogares,
La inseguridad ha pasado a un término inferior en San Fernando, donde los empleos son escasos, de tal manera que diariamente, por medio de las redes sociales, se anuncian los servicios de personas de todas las edades, ofreciéndose a servir de niñeras, cuidar personas adultas mayores enfermas, trabajar en ranchos o realizar cualquier tipo de trabajo informal que les permita llevar algo de dinero a sus hogares.
Actualmente son tiempos políticos, de muchas promesas, donde la población espera propuestas serias, fundadas y factibles, entre ellas con el tema del empleo, donde los candidatos sean capaces de ofrecer algo más que gestionar trabajo, sino que hablen de la manera que esperan conseguirlo y sobre todo, que asuman el compromiso de lograrlo, para que no quede igual que como ha ocurrido en las últimas décadas, en meras expresiones de proselitismo electoral.