La ciudad se encuentra invadida por una nube de finas arenillas procedentes del desierto del Sahara, que ayer arribaron a esta región, con riesgo de padecimientos en las personas que las inhalen, o reciban en la vista.
De acuerdo a las recomendaciones de Protección Civil Municipal, las personas deben utilizar cubre bocas y lentes para evitar el contacto con las arenas, que pueden complicar situación de quienes son hipertensas o con padecimientos de las vías respiratorias.
Damián Dávila Palomo titular de ese organismo en San Fernando, recomendó a la población abstenerse al máximo de andar en la calle sin protección, resguardarse en los hogares y tratar de cerrar las casas en la forma más hermética posible, ya que por ser arenas muy finas, son capaces de penetrar por cualquier resquicio.