Pese a que solo un sector de la población fue autorizado para retomar actividades dentro de la llamada “nueva normalidad”, en San Fernando se puede observar una dinámica cercana al cien por ciento del ritmo de vida tradicional.
En las calles se puede apreciar durante los días hábiles un movimiento intenso que se refleja en la circulación vehicular y la mayor parte de los comercios abiertos, aunque algunos no están autorizados para funcionar al público, considerando que no se trata de actividades básicas.
Mientras que en los fines de semana, las principales calles de la ciudad se miran atestadas de jóvenes en su mayoría, dando “el rol”, sin considerar las recomendaciones para quedarse en casa y evitar el riesgo del contagio de Coronavirus.
También, la necesidad de las familias por obtener ingresos para resolver necesidades comunes de los hogares, ha provocado que el 90 por ciento de los comercios ya estén abiertos y que se paulatinamente se estén relajando los porcentajes de atención al público en el interior de los establecimientos.
De la misma manera se aprecia que un segmento considerable de la población se mueve en las calles sin cubre bocas y en ciertos casos, en espacios de aglomeraciones tradicionales, las personas no respetan la distancia recomendada por las autoridades del ramo.
Pese a que ya van dos muertes oficialmente a causa del Covid 19, una cifra considerable de personas desestima la existencia y peligrosidad del virus porque en casos que han dado positivos, los familiares más cercanos de los infectados, han dado negativos s las pruebas que realiza la propia Secretaria de Salud.