Desde hace diez años en que iniciaron en la región las explotaciones de gas natural, se han resentido temblores de bajo impacto, que podrían aumentar de intensidad, conforme avance el movimiento de las placas tectónicas.
Del año 2010 a la fecha, el Servicio Sismológico Nacional –SSN- ha detectado más de 10 movimientos telúricos en la región de El Valle de San Fernando, todos ellos menores a los 3.6 grados en la escala de Richter, que aunque no han causado afectaciones materiales cuantiosas, ni pérdidas de vidas humanas, confirman a esta región como zona sísmica.
Esta situación se ha venido presentando desde que iniciaron las explotaciones de pozos gasíferos, en que las empresas han perforado a una profundidad de hasta 21 mil pies, lo que ha debilitado el terreno ya que se han realizado cientos de horadaciones, para encontrar yacimientos abundantes del energético.
Por esta causa, es común observar viviendas de construcciones solidas con cuarteaduras en interiores y exteriores, que son atribuidas a los temblores registrados en los últimos años, ante el creciente temor de otros movimientos sísmicos de mayor volumen, después de los registrados horas atrás en varios estados del país.