A TAMBOR BATIENTE
En la próxima disputa por el poder estaremos viendo que solamente dos partidos políticos son legítimos en las aspiraciones para acceder o retener el poder; el resto no serán más que “paleros” del par de entes electorales, que están trabajando para consolidar su hegemonía o conquistar nuevos territorios en el escenario estatal y nacional.
Por lo que hace a Tamaulipas, los partidos que pueden presumir de tener fuerza y posibilidades de ganar los Ayuntamientos, Diputaciones Locales y Diputaciones Federales que estarán en juego el 6 de julio del 2021, son Acción Nacional –PAN- que gobierna en el estado, cerca del 85 por ciento de los municipios y con una mayoría visible en el Congreso Local.
El resto de los partidos que aún “patalean”, son el PRI, el Partido Verde, el MC, el PT por citar algunos, que en su mayoría van a ir como aliados de las dos principales alternativas político- electorales que se han mencionado.
Estos partidos venidos a menos en las últimas épocas, no tienen penetración suficiente entre la militancia y los recursos públicos procedentes del financiamiento que otorgan el Instituto Nacional Electoral y el IETAM, no les alcanzaría tampoco para asegurar la victoria en ninguno de los distritos locales, federales o sobre los Ayuntamientos de Tamaulipas.
De tal manera que para sobrevivir, es decir para no perder el registro y para que quienes los dirigen puedan seguir disfrutando de los beneficios a que están acostumbrados, necesariamente tendrán que convertirse en satélites de los institutos políticos mejor posicionados.
En lo que sigue, vamos a ver muchas negociaciones aspirantes desde “ramplones” hasta de medio pelo postulándose bajo las siglas de partidos “paleros”, qué le van a entrar al quite por un precio a sus servicios, que los llevarán a realizar pantomimas disfrazadas de campañas de proselitismo, para restarle votos a uno de los dos partidos mayores y poder consagrar el triunfo de quién pague mejor.
Se escucha exagerado este comentario pero estamos hablando de pura mercadotecnia política, donde el dinero es el común denominador de los esfuerzos, en una actividad donde se concentra una elevadísima inversión del dinero público para que los partidos y los políticos puedan hacer el gran negocio, sacrificando el bienestar que los ciudadanos podrían tener, si esos recursos si se aplicaran en aspectos del bienestar social
Actualmente hay 7 partidos políticos a nivel nacional y 7 más están por romper el cascarón; ya en el mes de julio sabremos exactamente cómo quedará la composición en la arena electoral del país, donde por cierto los nuevos partidos no podrán ir en alianza porque la reglamentación lo prohíbe cuando se trata de la primera participación en las urnas, pero si podrán rentar sus siglas al mejor postor desde su inicio, y asumir en automático, la categoría de “paleros”… ¿usted qué opina?.