A TAMBOR BATIENTE
Se pusieron las peras a peso en Tamaulipas; ante el riesgo de arrestos a los Servidores la Nación por una supuesta violación a los protocolos de salud en una crisis sanitaria y luego que personal de la COEPRIS en horas de la noche, casi furtivamente, pusiera sellos de clausura en el CETis 29 para impedir el uso del local para la entrega de los apoyos enviados por el gobierno de la 4T, esta mañana en las afueras del plantel se continuó con el reparto… pero ahora con el apoyo de la Guardia Nacional.
De esta manera se cumple con los tiempos de la entrega, pero además cuidando que se respeten las normas básicas de seguridad sanitaria establecidas por la Secretaria de Salud, permitiendo de esta manera que el universo de ancianos beneficiados, tenga en sus manos ese importante beneficio económico.
Pero al margen del apoyo social, estamos viendo una guerra de poderes, donde la parte más débil es el estado; horas antes de la clausura del CETis 129 se corrió la voz sobre una presunta acción punitiva en contra del personal del gobierno federal.
La orden atribuida a los niveles máximos del gobierno estatal, se convertiría en detención de los servidores de la nación por incurrir en actos de desobediencia a los protocolos sanitarios derivados del Covid 19, al menos eso trascendió desde la noche anterior, es decir en las últimas horas de este sábado.
Pero ¡sorpresa!; hoy el evento de entrega de apoyos realizado a las afueras del CETis 129 amaneció blindado con elementos de la Guardia Nacional que en patrullas pick up y tanquetas se apostaron a las afueras de la institución educativa, resguardando con su presencia cualquier acción de parte de las autoridades estatales… y pa’ tras la gente.
Hasta ese punto andan las cosas en Tamaulipas, donde lejos de prevalecer la coordinación institucional para agilizar la entrega de los recursos federales y no exponer a los beneficiarios a un contagio, o simplemente las condiciones del clima, se tomaron medidas que pudieron haber derivado en situaciones más graves.
Porque entre los adultos mayores y sus representantes, ya se estaban tomando acuerdos para echar a la Policía Estatal o al personal de la COEPRIS, si estos se atrevían a presentarse en el sitio, para tratar de impedir la entrega de los recursos.
Por cierto que en las imágenes difundidas ayer sobre la clausura del CETis, salieron a relucir medios rostros de funcionarios que por primera vez se atrevieron a salir del closet y que en reiteradas ocasiones han sido señalados de solapar al Ayuntamiento, que al tener inundada de basura a la ciudad somete a sus habitantes a riesgos constantes de salud, a las tortillerías, donde las personas que despachan, son las mismas que cobran y también de sostener arreglos con despicaderos de mariscos y otros negocios, donde la dependencia debería mantener una férrea vigilancia.
Por cierto que en cuestión de imagen, en esta guerra absurda, el gobierno de Tamaulipas está llevando todas las de perder ante los ojos de la sociedad, porque privilegiando los intereses políticos, han venido haciendo todo lo posible por evitar que se repartan los apoyos de los adultos mayores, lo que ha sido muy mal visto, porque existen muchas formas de fastidiar o de estar en contra, pero sin evitar que los beneficios públicos lleguen de manera oportuna y segura a la población más necesitada.