Derivado a la contingencia sanitaria del COVID-19 que mantiene al país paralizado, al igual que a los Estados Unidos, el negocio que mantiene a miles de familias en San Fernando de la venta de carros americanos en el sur de país podría extinguirse en las próximas semanas, provocando el colapso de la economía local.
Lo anterior luego que en últimos días los “carreros” han manifestado su preocupación por que en ciudades de Guanajuato –principalmente- donde comercializaban sus unidades de procedencia extranjera, no hay compradores, solamente revendedores que ofrecen una miseria por sus vehículos, por lo que muchos desde ya, están optando por no ir a vender.
En las próximas semanas en que la situación colapse, no nada más familias de los comerciantes de autos sufrirían las consecuencias, se llevarían en la cadena a hojalateros, mecánicos, tapiceros, choferes, yonqueros y demás que forman parte del negocio que representa una de las principales fuentes de ingresos en el municipio.
El encarecimiento brutal del dólar y el cierre de la frontera son otros de los factores importantes que se asocian para amenazar con la extinción de este oficio que prevalece desde décadas en el municipio. No obstante esperan que pase pronto la crisis y poder recuperarse para mantener a sus familias debido a que del gobierno no esperan ninguna ayuda.