Victoria’s Secret, la famosa marca de lencería con problemas económicos, propiedad de L Brands, fue vendida en días pasados a una firma de capital privado en un acuerdo de 525 millones dólares.
Sycamore Partners y L Brands dividirán el control de la marca: la firma de capital privado compra una participación del 55%, mientras que L Brands tomará el control del 45% restante, y Victoria’s Secret se convertirá en una empresa totalmente privada.
Victoria’s Secret ha luchado a lo largo de estos años porque no supo adaptarse a la demanda de los consumidores que pedían más sostenes a la medida y mensajes inclusivos en sus anuncios publicitarios.
Aunque las tendencias de marketing en lencería han cambiado, Victoria’s Secret se quedó principalmente con el mismo discurso que lo ayudó a dominar la industria: sostenes push-up y modelos sexys y famosas.
Las ventas en las tiendas de Victoria’s Secret en el mundo, que abrieron al menos un año, cayeron un 10% en el cuarto trimestre, señaló L Brands.
El duro golpe a la firma fue cuando modelos y ejecutivas lanzaron su poderosa carta donde acusaban a ejecutivos que fueron acosadas e intimidadas durante décadas debido a una “cultura arraigada de misoginia”, según una investigación de ‘The New York Times’ publicada el pasado diciembre.
FUENTE ELGRAFICOMX