La presencia constante de animales obstruyendo la circulación vehicular en diferentes calles de la colonia Paso Real, da la impresión que este asentamiento humano es uno más de los ejidos que existen en el municipio.
En esta área de la población es típico observar cómo vacas, cerdos y aves de corral se atraviesan en calles pavimentadas o de terracería, ante la apatía de sus propietarios, que los dejan andar libremente.
Lo anterior aunado a que las lluvias han propiciado el crecimiento de pastos y matorrales, los animales se dedican a comer y caminar por las calles de la colonia, generando condiciones inadecuadas para la imagen urbana de este asentamiento.
Personas que radican en las calles Avenida del Rosal, Azucenas, Dalia, López Portillo y aledañas, señalan que semovientes transitan por las calles de esa colonia como si anduvieran en un ejido, lo que a todas luces, es incorrecto, aunque le dan al sector el aire rustico de las poblaciones rurales de donde proceden la mayor parte de los actuales habitantes de la colonia Paso Real.