Las carreteras del norte de Tamaulipas se miran saturadas de comerciantes de origen centroamericano, que se dedican a la compra de vehículos en los Estados Unidos de Norteamérica, para trasladarlos a sus países de origen y residencia y que transitan por las carreteras de la región sin las precauciones debidas.
Es común observar docenas de vehículos tripulados por personas de origen salvadoreño, dominicanos, costarricenses y otras naciones de Centroamérica, estirando con otras unidades, a carros y camionetas que han sufrido impactos en colisiones o desperfectos en sus máquinas, mismas que llevan hasta sus países, donde las reparan y finalmente venden, como parte de su actividad cotidiana.
Sobre de este comercio que realizan personas de esa región de América Latina, se escuchan comentarios entre los conductores de la región sobre el incremento en el riesgo de accidentes, que estos ciudadanos de otros países del continente podrían provocar, debido a que manejan estirando otras unidades, en muchas ocasiones sin señalamientos y sin cubrir las precauciones del caso.
Mencionaron que en años anteriores se han registrado amargas experiencias de choques que han dejado saldos sangrientos, donde han participado Centroamericanos que llevan vehículos de los Estados Unidos de Norteamérica a lugares donde tienen su residencia.
Por tal motivo externaron que es necesario que se extreme la vigilancia de las autoridades federales sobre estas personas ya que aunque realizan una actividad que se puede considerar como licita, también representan un peligro para los connacionales que viajan por las carreteras de esta zona del país.
Admitieron que el paso de estas personas por Tamaulipas y la región de San Fernando deja alguna derrama económica, pero también, que están convertidos en un riesgo para la seguridad de los demás viajeros que transitan por las carreteras de esta región con el riesgo de ser víctimas de accidentes.