Pese a que las vedas y condiciones climáticas no han sido las más adecuadas para la captura de especies acuáticas en aguas de la laguna madre, los pescadores vienen aprovechando recursos de la misma actividad, que les permiten nivelar sus ingresos, de acuerdo a sus mismas expresiones.
Por ejemplo: “El Buche” o flotador de la especie de escama conocida como Trucha, alcanza en el mercado un precio de hasta 500.00 pesos por kilogramo, lo que representa un fuerte atractivo a quienes se dedican a la pesca en aguas del vaso lacustre.
Este órgano de las truchas tiene alta demanda nacional porque existe la creencia de poseer un efecto afrodisiaco entre las personas que la ingieren, por lo que su consumo se concentra más en las personas de edad avanzada o que por alguna causa presentan problemas de impotencia sexual.
Esto nivela de alguna forma los bajos ingresos que se registran en la laguna madre ante el avance de los primeros frentes fríos –ya van 12- de la temporada invernal 2023- 2024 en el gigantesco cuerpo de agua hipersalino, que impiden que los pescadores puedan salir a realizar las actividades cotidianas debido a los fuertes vientos y el fuerte frio que se resiente.
Refieren que “El buche” o flotador de las truchas tiene cierta comparación con la vejiga de la Totoaba, especie de escama que abunda en el Alto Golfo de California –una extensión del Océano Pacifico- y que se la llamado “la cocaína acuática”, ya que en el mercado chino, su precio ha llegado a superar a los 8 mil 500 dólares.
De esta forma, pescadores de la laguna madre que salen al mar es benéfico encontrarse con bancos de truchas en sus trayectos, ya que además de tratarse de una especie que tiene buen valor comercial, con la extracción de los flotadores para venderlos en kilos por separado, pueden tener un ingreso adicional que compense las situaciones adversas que les toca vivir por diversas circunstancias.