Al a partir del viernes pasado en que dieron comienzo las vacaciones decembrinas en escuelas del nivel básico en San Fernando, Burgos, Méndez y Cruillas, amantes de los ajeno podrían hacerse presentes como años anteriores y dejar a los planteles con más carencias, de las que ya presentan.
Debido a esta situación, directivos escolares al tomar conciencia de lo que puede pasar en días siguientes, están tomando precauciones como llevar a sus domicilios las cosas de mayor valor, así como acordar entre los padres de familia y vecinos, reportar de inmediato ante las autoridades cualquier actividad sospechosa que realicen personas cerca de los planteles.
Desde cableado eléctrico, tubería de agua, computadoras, televisores, aires acondicionados, cañones reproductores, ventanales y hasta puertas, en temporadas vacacionales anteriores han desaparecido de las escuelas, donde la falta de vigilancia por parte de veladores, acentúa este tipo de riesgos.
De acuerdo con propios responsables escolares, cada vez que un plantel sufre un atraco, es bastante dificultosa la recuperación de los bienes, debido a que se tienen que realizar actividades para recaudar fondos y volver a comprar al menos lo más indispensable, ya que no existe presupuesto oficial destinado para cubrir algunos tipos de eventualidades.