El proceso para la elección de consejeros del partido MORENA realizado el sábado anterior, al menos en el distrito 3 con cabecera en Rio Bravo dejó diversas lecturas, entre las que destaca que la podredumbre de la política que siempre se ha criticado en los partidos políticos, no es ajena a La Esperanza de México.
Una vez que fueron dados a conocer los resultados de las votaciones –donde al menos de San Fernando se reportan cerca de 400 acarreados- se dejaron sentir reacciones de indignación de militantes que repudiaron las viejas prácticas, que riñen por completo con los postulados de la Cuarta Transformación.
A todas luces fue un proceso manipulado, inducido, que salió en los mejores términos para quienes desean mantener el control del nuevo órgano partidista, que tendrá a su cargo importantes decisiones, al estilo de lo que era –o es- el consejo político del PRI.
Uno de los casos visibles que causaron irritación entre los militantes de MORENA, fue la anulación de una cifra importante de votos a la sanfernandense MARA ADELA AMJETH DÁVILA JIMÉNEZ, bajo el argumento de escribir el nombre incompleto, solo como MARA DÁVILA, como es popularmente conocida esta señora icono del Morenismo.
Aparentemente no habría acarreo, porque esta es una de las practicas que más detesta el líder moral de MORENA en el país, el Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, pero en Tamaulipas hicieron lo que quisieron sin el más mínimo rubor y lo peor, atropellando los derechos de auténticos y Morenistas que fueron desechados por motivos pueriles.
Y la pregunta… ¿seguir estas viejas prácticas que chocan con la ideología de MORENA, unen o dividen a ese partido político?.
Por lo que se escucha, personajes que se encuentran inconformes, podrían tomar senderos alternos a la 4T, lo que en política se denomina “restar”, cuando el ejercicio del sábado anterior, debió ser terso, acrisolado y convertirse en un instrumento para sumar.
Pero la codicia por el poder puede ser tanta, que se olvidan de las formas y la vista no les alcanza para ver el fondo, de tal suerte que si las cosas siguen como van y en la repartición de los cargos estatales, un solo grupo se apodera de los espacios y los entregan a ex militantes de otros partidos, sin tomar en cuenta a los auténticos Morenistas… ¡cuidado!.
La ambición generalmente termina por romper el saco, más cuando en lugar de convidar, se aplastan a los que en el camino se pueden convertir en los mejores aliados y que como enemigos, pueden hacer naufragar cualquier proyecto.
La soberbia y el egoísmo son las principales características de la ignorancia en la política.