Las temperaturas extremosas que se padecen en San Fernando están haciendo que salgan de sus madrigueras toda clase de bichos, entre arañas, víboras, alacranes entre otros, donde sobresalen las tarántulas, animales de aspecto aterrador, que de acuerdo a las creencias populares, inyectan un veneno muy potente, capaz de matar a las personas.
Sin embargo, estos animales que en estos días están apareciendo en los hogares a raíz de las altas temperaturas en busca de lugares más frescos donde refugiarse, son inofensivas pese a su aspecto desagradable, ya que el veneno que inoculan es de baja toxicidad, de tal forma que no pone en peligro la vida.
Las tarántulas no pican, simplemente cuando se sienten agredidas o bajo amenaza utilizan sus finísimos dientes para morder, sin causar mayor efecto, más que el susto de sentir sobre alguna parte del cuerpo, a esta clase de criaturas negras y peludas.
La versión popular que habla de un veneno muy fuerte es un mito que se ha ido incubando al paso de los años y que se refuerza por el aspecto de estas arañas, que pertenecen a la familia de las theraphosidae, que son de las más grandes y vistosas a nivel mundial, mientras que México es el segundo país con mayor variedad de esta especie.
En México se conocen 13 géneros y 92 especies de esta arácnido, con un 93 por ciento de ejemplares endémicos, mismos que suministran en la mordedura una enzima que curiosamente, tiene efectos benéficos en tratamientos médicos, ya que incrementa la velocidad en absorción de medicamentos, disminuye el malestar de molestias intramusculares y mejora la permeabilidad capilar.
Las tarántulas en este país están protegidas por la Ley General de la Vida Silvestre y su reglamento, así como por la norma oficial mexicana NOM-059- SEMARNAT-2021 sobre la protección ambiental de especies nativas de México, flora y fauna silvestres y matar un arácnido de este tipo, es considerado un delito que se castiga con 1 a 9 años de cárcel y multa por el equivalente de 300 a 3 mil días de salario minimo.