En condiciones muy crispantes se encuentra la diputada local de Tamaulipas URSULA PATRICIA SALAZAR MÚJICA de MORENA, quien se hizo famosa por un parentesco en tercer grado con el Presidente de México ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y quien fue “balconeada” de exigir “moches” a proveedores del CONALEP donde prestaba sus servicios.
El Congreso de Tamaulipas vive momentos épicos históricos, con el enfrentamiento de las principales fuerzas parlamentarias que de momento han dado la victoria a los panistas y sus aliados, que con hábiles maniobras, lograron despojar a los diputados de MORENA de la presidencia de la junta de coordinación política.
Y lograr el desafuero de URSULA SALZAR es la próxima parada. A la mujer se le acusa de cohecho, teniendo como prueba una llamada telefónica donde supuestamente, la diputada le exige una participación económica a un proveedor, misma que fue difundida a través de las redes sociales, para exhibir a la fémina, contra quien ya se ha iniciado el proceso para despojarla de la investidura parlamentaria y que pueda ser juzgada como cualquier mortal.
Esto viene a ocurrir en los momentos en que la confrontación por el poder en Tamaulipas está entrando en sus momentos más álgidos, luego de recientes acontecimientos y discursos incendiarios, entre las partes que se disputan el mando político del estado.
Poner en la guillotina a URSULA SALAZAR tiene una connotación múltiple; quitarle el fuero y procesarla demostraría la capacidad de exterminio de la fracción panista, asestar un golpe a la corrupción, domesticar a otros diputados de MORENA que a estas alturas andan “rejegos” y… darle una bofetada con guante blanco al Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Por cierto que a una pregunta que le hicieron a AMLO sobre su parentesco con la diputada local tamaulipeca dijo que no la reconocería si la tuviera enfrente, es decir dejó en duda el parentesco, por lo que moralmente no le dolería tanto la suerte de la fémina, le haría mas mella saber que la defenestrada, es una legisladora de su partido.
En estos momentos, la pelota está en la cancha de la Fiscalía General de Tamaulipas que dirige IRVING BARRIOS MÚJICA, que recibió una petición del Congreso del Estado para retirar la inmunidad procesal penal a la coordinadora de la fracción parlamentaria de MORENA, que por razones obvias, será concedida.
El proceso de un desafuero lleva como máximo un término de 90 días, para cuando se venza ese plazo ya habrán pasado las elecciones y el interés por el desafuero de la diputada local morenista podría estar en segundo o tercer plano, dependiendo del resultado en las urnas.
Pero con esa manera magistral y sumaria como han manejado al Congreso de Tamaulipas, después de perder la mayoría en las elecciones del año anterior, al quitarle la presidencia de la Junta de Coordinación Política, hacen que el desafuero de la diputada morenista se vea como algo muy simple, es decir factible de realizar.
Nótese que los tiempos actuales, son de barbarie política, donde por encima del dialogo y los acuerdos, prevalece la ley del más fuerte y en Tamaulipas el PAN ha demostrado que no perdona ni tolera, que el choque es una de sus principales fortalezas y que a cualquier costo, consigue siempre lo que se propone.
En el caso de la diputada SALAZAR MÚJICA, aun queriendo ayudarla, desde la federación no pueden hacer nada por ella, porque el asunto se remite totalmente a instancias locales, que desde el silencio, por anticipado van a completar la faena, para exhibir como trofeo, la cabeza de un familiar del Presidente de la República.