Las precipitaciones pluviales se están convirtiendo en un “tiro de gracia”, que acelera de manera vertiginosa la destrucción de calles pavimentadas en la cabecera municipal, donde al paso de los días, los baches existentes cobran mayores dimensiones y aparecen otros sobre las superficies donde transitan unidades de fuerza motriz.
Vecinos de la zona centro de la ciudad enviaron fotografías a este medio donde se aprecian los profundos hoyancos en que se han convertido horadaciones en el pavimento, que hasta hace algunas semanas, se veían menores.
Con las lluvias ligeras que se han venido resintiendo en los últimos días las medidas y profundidades han terminado por superar los ocho centímetros de carpeta, en el caso del asfalto para mostrar la superficie de tierra, que tiene como base el pavimento.
Algunas calles de la zona centro de la ciudad han sido reparadas con tan mala calidad en materiales y mano de obra, que los mismos baches que habían sido rellenados, son ahora lucen más aparatosos.
Petróleos Mexicanos otorga de manera sistemática donaciones de materiales para trabajos de bacheo en todos los municipios donde mantiene zonas de explotación en cantidades suficientes para tener a las calles en buen estado, pero en San Fernando esos apoyos se usan para pavimentar calles, que son aprobadas con dinero del gobierno federal en su totalidad, lo que permite al municipio ahorrarse el costo del asfalto.