La violencia familiar que se ha agudizado durante el aislamiento social impuesto por la pandemia del COVID-19, está afectando a niños y adolescentes; por lo que es urgente armonizar las leyes estatales con las federales a fin de sancionar este tipo de delito.
La Diputada Sara Roxana Gómez Pérez, considera que es urgente realizar diversas modificaciones a la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes del estado, en materia de prohibición del castigo corporal y humillante como método correctivo o disciplinario a las y los menores en Tamaulipas; lo anterior, a fin de armonizar dicho instrumento normativo con la Ley General en la materia.
Puntualiza que en México, la prevalencia del castigo corporal y humillante como una forma de violencia contra niñas, niños y adolescentes es preocupantemente alta de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Niñas, Niños y Mujeres, en donde se destaca que el 63% de este sector social de 1 a 14 años han sido o son sujetos de agresión psicológica y/o castigo corporal.
En lo que respecta al año 2020, particularmente, en el contexto de la pandemia ocasionada por el COVID-19, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se han reportado durante el confinamiento (marzo- septiembre), 425 mil llamadas de emergencia por violencia familiar.
La Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, tiene por objeto reconocer a este sector social como sujetos plenos de derechos; asimismo, dicha ley establece las competencias de los tres órdenes de gobierno a efecto de proteger, reconocer y garantizar los derechos de las y los menores.
En ese sentido, apunta que si bien es cierto que a nivel estado existe un instrumento normativo encargado de tutelar los derechos de las y los menores tamaulipecos; la cual, debe encontrarse armonizada con la referida Ley General a fin de garantizar el respeto irrestricto de estas importantes prerrogativas.
Comparte que se ha publicado en el Diario Oficial de la Federación, el decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, cuyo propósito principal es prohibir el castigo corporal como método correctivo o disciplinario a niñas, niños y adolescentes.
En dicha reforma, se consideró que “los efectos nocivos del maltrato se manifiestan en las dimensiones físicas, cognitivas, emocionales y conductuales de su desarrollo, estas manifestaciones los acompañan hasta la edad adulta y propician la reproducción del círculo de violencia en la sociedad.
Agrega que es vital la prevención a través de la promoción de un entorno propicio para desincentivar y disuadir el uso del castigo corporal como un método de crianza.
FUENTE ENLINEADIRECTA