A TAMBOR BATIENTE
Con el primer caso de Covid 19 en San Fernando, confirmado ayer de manera oficial por la Secretaria de Salud en Tamaulipas, se hace urgente y necesario tomar medidas que puedan mitigar la situación en que se encuentran cientos de familias afectadas en sus ingresos por la suspensión de actividades comerciales y laborales, que seguramente se van a poner peores.
Al margen de ser cierta o no la información oficial –porque muchas personas dudan- el aislamiento tendrá que reforzarse, luego que tampoco se pueden hacer experimentos con la salud propia.
Pero aislamiento es igual a problemas económicos para surtir la despensa y quedarse sin electricidad en los hogares o sin agua potable, por falta de pago de estos servicios, luego entonces, en los días que siguen será cada vez más imperativo que la ayuda del gobierno llegue en mayor proporción a los más afectados por la contingencia sanitaria.
Creo que no pasaría nada si la Presidencia Municipal deja de invertir en gastos que no sean esenciales, cumpliendo con las normas se puede modificar el gasto programado, mediante la aprobación del Cabildo y del Congreso de Tamaulipas.
¿De qué sirven los encalichamientos cuando el pueblo tiene hambre y necesidades básicas que no se pueden resolver de la manera acostumbrada a causa del aislamiento?.
Suspender los apoyos a los miembros del cabildo, que por cierto disfrutan muy cómodos de la cuarentena ganando 30 mil pesos mensuales, sería otra forma de ahorrar para tener más recursos a disposición de las familias más necesitadas.
Todo se puede, porque los gobernantes siempre hacen lo que quieren, de tal manera que modificar el esquema del gasto en el presupuesto de egresos 2020, únicamente es cuestión de forma; pero seguramente que a nadie se le ha ocurrido, porque en una recomposición de este tipo, se irían ganancias personales que ya están consideradas, es decir casi en la bolsa.
También hacer inversiones con sentido de lucro político, regalando premios que no son esenciales, es algo que debería evitarse, considerando que como comúnmente se dice, “el horno no está para bollos” y así, hay una larga lista de erogaciones que en tiempos normales se pueden realizar sin mayor problema, pero ahora que ya hay un caso confirmado de la pandemia en San Fernando, es tiempo de ver otros escenarios, tomar medidas propias de una contingencia, haciendo de los recursos públicos el instrumento para intentar el principal objetivo de todas las políticas sociales: el bienestar de la sociedad.