Ante el inicio de veda del camarón que prohíbe que miles de pescadores salgan a la captura de esta especie acuática y mantiene sin ocupación a cientos de familias que se dedican al “despique” de crustáceos, es urgente que se implemente un programa temporal de empleo.
Pescadores radicados en la ribera del vaso lacustre señalaron que “nos urge que a la brevedad pongan en marcha el empleo temporal y que nos traigan toda la ayuda que sea posible porque nuestras familias tienen que comer y al quitarnos la oportunidad de capturar camarón y procesarlo, nos están quitando la comida de la boca”.
La veda del camarón en la laguna madre se viene llevando a cabo desde 1993 y durante el periodo de prohibición de captura, que de acuerdo a las autoridades de pesca, se lleva a cabo con “fines experimentales”, los pescadores y sus familias pasan por una larga temporada de privacidades.
A la veda oficial que saldrá el día 11 de julio, entrará inmediatamente la veda natural producida por la “Canicula” como se conoce a la temporada más calurosa del año, debido a la cercanía de la tierra con el sol, lo que origina que los camarones y otras especies acuáticas busquen resguardo por más de un mes en las partes más profundas, impidiendo su captura.
Entre la veda oficial y la veda natural, los pescadores dicen que son tres meses en que no podrán salir a capturar este producto en aguas de la laguna madre, lo que para ellos es terrible, porque con las especies de escama y otros mariscos, no ganan lo suficiente para sostener a sus familias, lo que los obliga a pedir la ayuda oficial, para transitar todo ese tiempo.