A TAMBOR BATIENTE
¿Hasta donde va a llegar este asunto del Coronavirus?… me temo que nadie los sabemos, pero medio mundo anda apanicado, porque ya para que el gobierno está cancelando eventos y cerrando escuelas, algo nos dice que flota sobre el ambiente, una amenaza mayor, a la que alcanzamos a percibir.
Tenemos la idea arraigada que el gobierno siempre tiende a disminuir cifras mortales y las estadísticas que pueden provocar una alarma mayor a la población, por esto mismo, cuando se comienzan a tomar medidas como las que estamos viendo, algo nos dice ¡¡¡aguas!!!.
También sabemos que este tipo de escenarios crean el ambiente propicio para que se realicen saqueos a los recursos del pueblo, aprovechando los momentos de terror; asi pasó cuando los tiempos peores de la inseguridad, hace apenas unos años.
Con esta experiencia ya sabemos cómo se las gastan las autoridades de los niveles superiores, por eso muchos dudan que la amenaza del Coronavirus, pueda ser algo realmente verídico… creen que es un distractor para tener las manos libres y los ojos del pueblo distraídos en el espectáculo.
Pero tampoco estamos para andar haciendo pruebas, lo que sí me parece, es que con el dinero de la suspensión de los eventos a causa de la peste asiática difundida por todo el mundo, se podría aprovechar ese dinero para la compra de Paracetamol, que está recomendado por la Organización Mundial de la Salud, como uno de los medicamentos más recomendados para tratar el Coronavirus; la caja de ese producto en presentación similar o genérica no rebasa los 20 pesos por mayoreo.
Así que invertir 100 mil pesos en ese medicamento puede ser la mejor manera de aplicar un presupuesto que ya estaba considerado para gastos de festividades, como las que se iban a realizar en San Fernando por el 271 aniversario de su fundación, con una inversión superior a los 500 mil pesos; hay mucha diferencia entre el beneficio de la diversión y la salud del pueblo.
O comprar unas 50 toneladas de limones para reglar por kilos entre la población, para consumo a manera de prevención; ¿qué tiene de malo aplicar recursos del pueblo en la salud de sus mismos habitantes?.
No todo son pavimentaciones o arreglo de caminos; el dinero del pueblo se tiene que aplicar en su bienestar y la salud es uno de los aspectos más preciados de los seres humanos.
Estamos en la antesala de la contingencia, o al menos esto es lo que nos indican las acciones y recomendaciones de los gobiernos y por supuesto que tenemos que poner nuestra mejor parte, atendiendo las instrucciones del Sector Salud, pero también las administraciones tienen que pensar en invertir recursos que ya tienen en sus manos, en una prevención que vaya más allá de las sugerencias y en el gasto de fondos públicos federales, estatales y municipales en el combate a la enfermedad, si esta plaga que no deseamos, llega hasta nuestras familias.
Agradecemos y aceptamos las recomendaciones, pero también necesitamos hechos… he aquí una oportunidad para lograr parte de la credibilidad que el pueblo ha perdido.