De no llover dentro de las próximas dos semanas, una importante superficie de sembradíos de sorgo comenzará a colapsar, porque las plantas ya se comienzan a ver marchitas, indicaron productores agrícolas de la región.
La parte más afectada del municipio de San Fernando se localiza al sur del rio Conchos, donde ya se comienzan a ver los estragos de la prolongada sequía, así como de los efectos causados por la fuerza de los vientos.
En los últimos días se han dejado sentir fuertes ráfagas superiores a los 70 kilómetros por hora, lo que aparte de golpear las plantas, ha terminado por secar la escasa humedad, sobre todo cuando han sido vientos del norte, que al ser más fríos, le quitan de manera más rápida la humedad al terreno.
También los ganaderos resienten esta situación porque la comida silvestre para los hatos se encuentra escasa y las represas se mantienen en niveles críticos de almacenamiento, lo que provoca que estén llevando agua y pacas de forraje hasta sus ranchos, para sostener los hatos.
Mientras que en relación con este mismo tema, los pronósticos del tiempo no marcan lluvia para las próximas semanas, y en contraparte, hay vaticinios de temperaturas de 39 grados en este mismo mes, lo que vendrá a empeorar la situación de productores agrícolas y pecuarios, cuando el clima comience a calentar en esos niveles.